Las inversiones en hidrógeno verde no han dejado de aumentar en los últimos años. Todas las grandes compañías están apostando fuerte por este gas renovable: Repsol, Iberdrola, Endesa, Cepsa, Naturgy, Acciona, ACS, Bosch, Siemens, Toyota, Hyundai, Airbus…
En este escenario, España comienza a asomarse como un gran productor si uno mira los planes presentados en el arranque de 2022: uno de cada cinco proyectos relacionados con el hidrógeno a nivel mundial se ubica en nuestro país.
Hablamos del gas más abundante en el universo y presente en el agua (H2O). El único problema es que en la Tierra no se encuentra hidrógeno en estado puro: hay que romper la molécula del agua para separarlo del oxígeno. Las energías renovables pueden suministrar esa energía necesaria para aislar el hidrógeno, en un proceso llamado electrólisis y de ahí la etiqueta «verde» para este primer elemento de la tabla periódica (H2).
El potencial de España en hidrógeno
«Impulsar las energías renovables es más urgente que nunca y España puede ser un gran referente para el resto de Europa», esto comentaba Ursula von der Leyen el pasado miércoles durante el Congreso Europeo del Hidrógeno 2022 en Madrid.
La presidenta de la Comisión Europea intervenía por videoconferencia ya que ese día se presentaba en Bruselas los detalles del plan «REPowerEU» para acelerar la desvinculación con el gas ruso. Hay dos renovables que claramente van a salir reforzadas como consecuencia de la guerra de Ucrania: la solar y el hidrógeno verde. En ambas tecnologías, España tiene ciertas ventajas.
«España es líder mundial y europeo en energías renovables», aseguraba Von der Leyen. «Ha construido una red rica y diversa de proveedores de energía y se ha convertido en un país muy atractivo para la promoción del hidrógeno verde».
Coincide con esta visión el Gobierno. «Ha llegado el momento de dar un salto cualitativo», indicaba Teresa Ribera, vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, durante el evento. España tiene unos «ambiciosos» proyectos en hidrógeno verde, que pasan por instalar una potencia de 4 gigavatios (GW) e invertir unos 8.900 millones de euros entre capital público y privado.
España ya dispone de una industria desarrollada para comenzar esta transición. La Asociación Española de Hidrógeno lleva veinte años trabajando en esta tecnología. Se tratan de electrificadores, unas máquinas necesarias para generar ese gas. Estos electrificadores ya se exportan a lugares como Estados Unidos (sobre todo California).
La ventaja del hidrógeno frente a otras fuentes renovables es que se almacena muy bien. Esta capacida de almacenamiento es la pieza que faltaba para poder aprovechar toda la capacidad de eólica y fotovoltaica proyectada en el futuro. Además, el poder disponer de un combustible alternativo al carbón o el gas natural ayudará a reducir las emisiones de CO2.
La cuestión del transporte
Lógicamente el tener tantísimo potencial productor llevará en algún momento a exportar los excedentes. Ahí entran en juego las interconexiones: hoy por hoy no habría forma de enviarlo al extranjero. Sin embargo, el proyecto del gasoducto ‘Midcat’, unión con Francia por Cataluña, gana cada día más fuerza.
«Para la creación de un futuro sistema energético de hidrógeno, España y Portugal se convierten en más importantes que nunca. Sus interconexiones son también importantes para el hidrógeno verde», destacaba Frans Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europea, esta semana.
En los planes europeos ya figura esta conexión desde el mediterráneo para el gas. El corredor es una de las infraestructuras claves contempladas en REPowerEU para reducir la dependencia de Rusia.
PSOE Y PP han acordado impulsar el gasoducto Midcat. El pleno del Congreso avaló esta propuesta hace unos días con los votos de los dos principales partidos con el objetivo de simplificar los trámites necesarios y que pase a ser considerado un proyecto de interés común.
Expertos consultados indican que es igual de importante construir el gasoducto que asegurarse de no depender de Francia para que nuestro hidrógeno verde llegue hasta los principales mercados europeos: Alemania, Dinamarca, Holanda y otros países del norte.
Para leer más noticias relacionadas con el hidrógeno verde, haz clic aquí.
Para acceder a la noticia original, haz clic aquí.