La Alianza insta a que la industria sea considerada una máxima prioridad en la próxima legislatura

La Alianza por la Competitividad de la Industria Española, conformada por las asociaciones empresariales ANFAC, AOP, ASPAPEL, FEIQUE, FIAB, OFICEMEN, PRIMIGEA, SERNAUTO y UNESID, ha hecho un llamado a las diferentes formaciones políticas para que, en la próxima legislatura, se dé máxima prioridad al impulso de la industria. Esta iniciativa se fundamenta en el significativo papel que desempeña la industria en la generación de riqueza y empleo de calidad, su carácter exportador y su inversión en investigación, desarrollo tecnológico e innovación.

Para lograr este propósito, se considera fundamental establecer una gobernanza eficaz y coordinada en la política industrial entre los distintos departamentos ministeriales y las administraciones competentes. Esta coordinación permitirá una implementación más efectiva de las medidas dirigidas a mejorar la competitividad de las empresas industriales.

A pesar de la importancia de la industria en la economía española y el apoyo a una sólida base industrial, es necesario abordar cambios en el entorno regulatorio para favorecer la inversión en el sector. Los retrasos administrativos, las inseguridades jurídicas y una sobrerregulación a distintos niveles están afectando a la industria, así como las nuevas medidas internacionales y reacciones a ellas, lo que plantea el desafío de mantener la inversión industrial en España.

Uno de los desafíos cruciales es el tema de la energía, ya que la industria manufacturera es un gran consumidor energético sometido a una fuerte competencia internacional. Se requieren medidas regulatorias urgentes para resolver el déficit permanente de competitividad energética en comparación con otras regiones industriales de la Unión Europea, asegurando precios estables, competitivos y predecibles, y la capacidad de responder a crisis energéticas.

La transición hacia una economía neutra en carbono también es un objetivo importante para la industria, lo que implica adoptar medidas que fomenten la descarbonización, la economía circular y la sostenibilidad industrial.

La Alianza destaca la importancia de atraer inversiones en I+D e innovación en un entorno altamente competitivo. También se hace hincapié en la necesidad de desarrollar nuevas fuentes de energía sostenible, como los combustibles y gases renovables, y establecer mecanismos para asegurar su acceso a precios competitivos, con un marco de incentivos públicos para la innovación y la producción de combustibles renovables.

Además, se enfatiza la necesidad de mantener una posición competitiva en la industria europea y promover la investigación y desarrollo de tecnologías de emisiones netas cero.

Por último, se menciona el reto de atraer talento joven, especialmente talento femenino, a la industria. Se solicita el apoyo del gobierno y las administraciones para asegurar la renovación generacional y atraer nuevos talentos al sector industrial, el cual es un importante generador de empleo de alta calidad en la sociedad.

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