La digitalización industrial ya no es una opción, sino una necesidad. En Castilla y León, la Junta ha destinado 3,5 millones de euros para apoyar a 124 industrias en su transición hacia la Industria 4.0, con un foco claro en la ciberseguridad y la incorporación de tecnologías innovadoras como la automatización y la inteligencia artificial.
¿Qué significa esto para las pymes?
Muchas veces las pequeñas y medianas empresas ven la transformación digital como un reto complejo y costoso. Estas ayudas buscan nivelar el terreno de juego, acercando a las pymes herramientas que antes parecían reservadas solo a grandes corporaciones.
Una oportunidad para crecer con el apoyo adecuado
La digitalización no se trata solo de instalar software o máquinas inteligentes. Requiere una estrategia clara, la formación de los equipos y el acompañamiento de partners tecnológicos capaces de guiar cada paso.
En este sentido, los programas de apoyo público son una palanca ideal: permiten a las pymes minimizar la inversión inicial y centrarse en lo importante, que es ganar en productividad, seguridad y flexibilidad.
Mirando al futuro: Industria 5.0
Estas inversiones no solo impulsan el presente, también preparan a las empresas para dar el salto hacia la Industria 5.0, donde la colaboración humano-máquina, la sostenibilidad y la personalización de productos marcarán la diferencia.
