AIReF muestra que la partida española es la segunda más baja de la Unión Europea. Solo con Irlanda por debajo.
En marzo de este 2021, el Gobierno dio luz verde a 7.000 millones de euros para ayudas directas a autónomos y empresas, sin embargo este suceso fue nada menos que un año más tarde que la mayoría de los países de la zona euro. Según la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), España es de los que menos ha contribuido en este sentido.
El estudio también matiza que no sólo se trata de que las ayudas sean escasas, sino que al mismo tiempo es de los países que más barreras pone para el acceso de las mismas. «Los criterios de acceso se encuentran entre los más restrictivos ya que la ayuda se reserva a los sectores más afectados», anota AIReF.
Por otra parte, también cabe destacar que las ayudas directas que han sido concedidas se han puesto en marcha de una manera mucho más lenta. «En comparación con el resto de países de nuestro entorno, se han adoptado de manera más tardía, un año después del inicio de la pandemia».
Para este análisis, AIReF ha estudiado los datos de Irlanda, Francia, Portugal, Alemania, Países Bajos, Italia y España. España es el segundo que menos PIB aporta a estas ayudas, un 0.6% para ser más exactos. Sólo por debajo de Irlanda con un 0,2% de PIB.