WhatsApp, la aplicación líder de mensajería instantánea a nivel mundial, se prepara para una transformación significativa que cambiará la manera en que nos comunicamos digitalmente. A partir de marzo próximo, la plataforma introducirá una esperada función: la interoperabilidad con otras aplicaciones de mensajería. Esta innovación permitirá a los usuarios de WhatsApp enviar y recibir mensajes de otras plataformas sin salir de la aplicación, marcando un hito en su historia.
La noticia fue anunciada por Dick Brouwer, director de ingeniería de WhatsApp, en una entrevista con Wired. Brouwer destacó los desafíos de equilibrar la interoperabilidad con terceros y la preservación de los estándares de privacidad, seguridad e integridad que definen a WhatsApp. Esta actualización se alinea con esfuerzos similares de otras compañías, como Apple con iMessage, que también se prepara para adoptar el estándar RCS y ampliar su compatibilidad hacia Android, indicando una tendencia hacia una mayor apertura en el mundo de la mensajería instantánea.
La iniciativa de WhatsApp de permitir la interoperabilidad no es casualidad, sino una respuesta directa a la implementación de la Ley de Mercados Digitales (DMA) por parte de la Unión Europea. Esta legislación busca regular a los «guardianes de acceso», plataformas dominantes en el mercado digital, exigiendoles adoptar medidas para garantizar la interoperabilidad de sus servicios. Meta, la empresa matriz de WhatsApp, se ve obligada a cumplir con estas normativas para evitar sanciones, acelerando así la introducción de esta característica revolucionaria en la plataforma.
La capacidad de comunicarse con usuarios de otras aplicaciones representa un avance significativo para WhatsApp, que hasta ahora mantenía sus fronteras cerradas ante competidores directos. Este cambio promete mantener el cifrado de extremo a extremo, asegurando la privacidad de las comunicaciones incluso al interactuar en diferentes plataformas. Aunque la lista completa de aplicaciones compatibles aún no ha sido oficializada, se espera que incluya nombres destacados como iMessage, Facebook Messenger, Signal, Skype, Google Messages y Telegram, entre otros, todos adoptando el estándar RCS para garantizar la nueva forma de conectividad.
El enfoque técnico de esta interoperabilidad se basa en la arquitectura cliente-servidor actual de WhatsApp. La compañía documentará su protocolo cliente-servidor para permitir a aplicaciones de terceros conectarse directamente a su infraestructura, asegurando una integración fluida y segura entre plataformas. Este esfuerzo de seis meses refleja el compromiso de Meta y WhatsApp con la adaptación a las demandas regulatorias europeas, abriendo nuevas posibilidades para la interacción entre usuarios de diferentes plataformas de mensajería.
Inicialmente, la interoperabilidad abarcará el intercambio de mensajes, imágenes, mensajes de voz, vídeos y archivos, con planes de extenderla a llamadas y chats grupales. Esta función será opcional para los usuarios, quienes podrán activarla para acceder a un menú de «Chats de terceros» en la parte superior de su bandeja de entrada, permitiéndoles recibir mensajes de otras aplicaciones. Este cambio responde a la demanda de usuarios que, aunque prefieren otras plataformas, se veían obligados a usar WhatsApp debido a su amplia adopción.
Brouwer explicó que estos chats estarán en una carpeta separada no solo por la diferencia entre interfaces, sino también porque inicialmente los usuarios no sabrán desde qué otra aplicación les están escribiendo. Los acuerdos con otras plataformas se iniciarán, y Meta tendrá hasta fin de año para implementar este cambio.
La Ley de Mercados Digitales de la UE emerge como un catalizador clave para este cambio, promoviendo la libertad de elección para los usuarios y desafiando el dominio de grandes corporaciones en el espacio digital. Al requerir que compañías como Meta permitan la interoperabilidad en aplicaciones como WhatsApp, la DMA busca nivelar el campo de juego, permitiendo que aplicaciones más pequeñas compitan en igualdad de condiciones.
La elección de participar en la interoperabilidad quedará en manos de los usuarios, quienes decidirán si desean abrirse al intercambio de mensajes con terceros. Esta flexibilidad es crucial para preservar la confianza de los usuarios en un entorno digital en constante evolución. Con casi 3.000 millones de usuarios registrados, WhatsApp sigue siendo la aplicación de mensajería instantánea dominante, pero esta actualización podría alterar significativamente el paisaje de la comunicación digital, ofreciendo una mayor libertad de elección y conectividad a través de diferentes plataformas.