Viajar en tren en los próximos años tendrá algunas diferencias respecto a las experiencias actuales. Sin embargo, conservará ciertas características óptimas del sector. Una de ellas es el empleo mayoritario de transportes eléctricos.
El director de Adif apuesta por la incorporación de trenes inteligentes, que puedan trabajar independientemente, sin recurrir a un conductor. El desarrollo de los trenes se lleva a cabo de la mano de la digitalización.
Con una fibra óptica en la vía del tren se podía detectar una piedra en el raíl o cualquier otro problema
Asimismo, el avance tecnológico se implantaría en cada etapa del viaje, incluyendo herramientas para comprobar desde la estación la batería y cantidad de coches eléctricos disponibles para alquilar o el número de taxis existentes en ese lugar.
La evolución del tren ofrece oportunidades
Para reducir las emisiones de combustibles, la digitalización potencia proyectos ecológicos para el progreso de la movilidad, como el tren de hidrógeno verde.
Igualmente, los trenes incluirán elementos elaborados a base de fibras de carbono menos pesados que los de acero o aluminio. Los gastos del sector suponen el reto principal en el desarrollo del sector, sin embargo, la tecnología será capaz de aportar resultados eficaces y óptimos.
Además, la tecnología basada en el hidrogeno logrará que los trenes no contaminantes utilicen más de un 35% de las vías no electrificadas en España.