Conexión entre flotas, mejora en la eficiencia y rutas totalmente optimizadas. Vitoria se suma a la transformación hacia la nueva movilidad con el Bus Eléctrico Inteligente (BEI).
Los medios de transporte, al igual que muchos otros sectores de la industria están adaptándose a la nueva movilidad. Por ello se busca crear vehículos que contaminen lo menos posible y luchan por las cero emisiones. No es de extrañar que abran camino entre los medios digitales para hacer más eficientes sus rutas, su consumo, el mantenimiento o incluso la interconexión de sus flotas.
Gracias a la compañía vasca Irizar, Vitoria ya cuenta con un autobús eléctrico (apodado BEI, Bus Eléctrico inteligente). Y tal y como cuentan en su página web se trata de «una nueva forma de movilidad con vehículos eléctricos, convoy de alta capacidad, plataforma de acceso en las paradas, carriles exclusivos y preferencia semafórica. El BEI es en definitiva un medio de transporte no contaminante que permite realizar los trayectos en menos tiempo.»
Su objetivo en el plan de movilidad es el de «mejorar e impulsar el transporte público» en Vitoria haciéndolo más «sostenible y eficiente».
Sin embargo las críticas se han hecho eco debido a la negativa del proyecto por parte de la oposición a Gorka Urtaran, actual alcalde de Vitoria. El motivo de estas críticas reside mayoritariamente en el coste de la ejecución y construcción del proyecto, pero a su vez, en la pérdida de aparcamientos así como de árboles.
«Animamos a sumarse a esta recogida de firmas para pagar los destrozos y la inseguridad del BEI de Urtaran», censuraba el PP. Esto unido al principal motivo del descontento que reside en el coste que supera los 55 millones de euros.
Las líneas elegidas para la transformación han sido la Línea Periférica 2a y 2b de TUVISA que une 14 barrios de Vitoria. Entre ellos se encuentran enclaves como el Hospital Universitario de Álava y la Estación de Autobuses.